El lienzo fué adquirido en Londres en 1944.
Hay sospecha de que el cuadro sea fragmento de un lienzo mayor, si se observa un objeto que parece iniciarse en el ángulo inferior derecho y que pudiera ser una cartela. El cuadro debió ser pintado entre 1628 y 1629, durante el segundo viaje de Rubens a España. Sánchez Cantón, que lo considera "magistral", piensa "que será el estudio del natural, previo al lienzo del Museo de Munich". La gran calidad y soltura de ejecución invita a distinguirlo entre réplicas que se conocen. Una de ellas se guarda en el Palacio Real de Madrid y otra estaba en el comercio Duveen, Nueva York.